Hacer fotos puede parecer, en principio, algo fácil. No se trata tan solo de apretar un botón, requiere tener "ojo fotográfico", saber componer y conocer adecuadamente nuestra cámara. Tener la pericia y rapidez suficientes para que no se nos escape ninguna toma o, al menos, las mínimas posibles. 

Un buen amigo sabe escuchar y dar buenos consejos, si se le piden. Las manos en esta fotografía denotan una actitud total de concentración, de interés en lo que a este señor le está contando su interlocutor durante un plácido paseo. Entrañable amistad, sin duda...

Un día de invierno, paseando por Córdoba, me crucé con una encantadora señora que se sentó muy cerca de mí a descansar un rato. En ese momento aproveché para captar lo que me parecieron unas manos elegantes, cansadas y plenas de experiencia. Nos miramos, nos sonreímos y continuamos nuestros caminos...

En nuestra cultura religiosa, la Semana Santa es un evento lleno de emoción, devoción, arte y sentimiento. El capataz cumple una labor fundamental al dirigir el trabajo de los costaleros durante la Estación de Penitencia. Su voz y sus manos son sus elementos de comunicación con su cuadrilla y su asunción de gran responsabilidad...

Otra de las innumerables posibilidades que nos ofrecen nuestras manos es la de ser creativos a través de la fotografía, por ejemplo. En esta instantánea aparecen las manos de mi hija encuadrando un bello rincón sevillano. Fotógrafa fotografiada...

La danza clásica es pura expresión corpora, puro lenguaje no verbal. Las manos captan, con inverosímiles y elegantes movimientos, la atención del espectador.  Mi cámara no puede ser menos y queda hipnotizada ante tanta plasticidad.

Creo que unas manos pueden expresar mucho. Muchas veces no hace falta ni ver la cara para percibir lo que pasa por la mente de la persona si tenemos sus manos a la vista. Este jugador de petanca nos está transmitiendo muchas cosas con sus manos, su  forma de coger la bola, su trapo mil veces usado... ¿Qué te transmite a tí?